La propuesta número dos, recientemente aprobada en las elecciones de la ciudad de Nueva York, otorga al Departamento de Saneamiento de la Gran Manzana (DSNY) una mayor autoridad para mantener limpias las propiedades de la ciudad, incluyendo parques, aceras y carreteras.
Esta nueva normativa también exigirá a los vendedores ambulantes cumplir con las regulaciones establecidas en estos espacios públicos. Cientos de dominicanos en la Gran Manzana, que operan como vendedores callejeros en diferentes condados, se verán afectados por esta medida.
Los vendedores ambulantes son aquellas personas que ofrecen bienes y servicios en espacios públicos, como aceras y calles.
En Nueva York, se estima que hay alrededor de 23,000 vendedores ambulantes, de los cuales 20,500 se dedican a la venta de alimentos. La mayoría de ellos son inmigrantes y veteranos, y su actividad genera aproximadamente 712 millones de dólares en impuestos para la ciudad, el estado y el gobierno federal, así como 293 millones de dólares en contribuciones a la economía local.
Además, el DSNY implementará nuevas regulaciones sobre la disposición de basura. A partir de este martes, se han puesto en marcha normas que exigen que las bolsas de basura se coloquen en contenedores con “tapas bien ajustadas”. Los contenedores deben tener una capacidad inferior a 55 galones.
A partir del 2 de enero de 2025, quienes no cumplan con estas normativas enfrentarán consecuencias económicas que oscilarán entre 50 y 200 dólares.