Las autoridades instaladas por Rusia en la península de Crimea reportaron el domingo haber derribado un misil crucero cerca de la ciudad de Kerch y la suspensión temporal del tráfico en el puente cercano que vincula ese territorio anexado con Rusia.
Sergei Aksyonov, instalado por Moscú como gobernador de Crimea, dijo que la intercepción del misil por las defensas aéreas rusas no causó daños ni víctimas. No dio más detalles, como el tipo de misil o su origen.
En la cercana región rusa de Rostov, las autoridades también reportaron haber derribado un misil. El gobernador Vasily Golubev dijo que se trató de un misil ucraniano y que resultaron dañados los techos de algunos edificios. No se reportaron víctimas.
Ese tipo de ataques, lejos de la línea del frente, en regiones rusas fronterizas con Ucrania o en la anexada península de Crimea, se han vuelto comunes en la guerra, que recién pasó la marca de 500 días.
Autoridades en regiones rusas y las asignadas por Moscú en Crimea, que Rusia se anexó ilegalmente en 2014, regularmente han reportado explosiones, ataques con drones e incluso incursiones fronterizas por saboteadores ucranianos. Kiev nunca se ha atribuido públicamente dichos ataques.
En octubre pasado, una enorme explosión dañó al puente Kerch— una vía importante de transporte y suministros para las fuerzas rusas en Crimea — dejándolo inservible durante varias semanas. En lo que pareció la primera admisión directa de Ucrania de que estuvo involucrada, la ministra de defensa del país, Hanna Maliar, incluyó el sábado ese ataque en una lista de los logros alcanzados hasta ahora en la guerra.