Santo Domingo, (EFE).– El número fallecidos por la ingesta de bebidas alcohólicas adulteradas en la República Dominicana subió de 11 hasta 21, informó este miércoles el Ministerio de Salud Pública, que cifró en más de 80 los casos de afectados por consumir estos productos en todo el territorio nacional.
De este modo, la institución mantiene la alerta epidemiológica vinculada a esta circunstancia y hizo un llamado a la población de abstenerse de ingerir bebidas alcohólicas de producción clandestina.
El director de Epidemiología del Ministerio, Ronald Skewes, indicó que el brote de intoxicación por metanol que comenzó durante la Semana Santa, y que sigue en aumento, ha causado defunciones en el Distrito Nacional, en los municipios de Santo Domingo Este y Oeste, en la provincia Monseñor Nouel, en Santiago y en Puerto Plata.
El 53 % de las muertes corresponde al sexo masculino y el 33 % tienen entre 20 y 29 años de edad, "algo preocupante", consideró Ronald Skewes rueda de prensa.
Hasta el momento, se han identificados dos posibles fuentes de contaminación, una a través de clerén adulterado y la otra por la circulación de una bebida preparada, del tipo de "cocktail frozen."
De su lado, la viceministra de Salud Colectiva, Ivelisse Acosta, dijo que el Ministerio de Salud junto a la Procuraduría General de la República y otras entidades aplicarán los mecanismos necesarios para frenar esta situación.
El clerén es un destilado de caña de bajo precio cuyo consumo está muy extendido en Haití, en la zona frontera dominico-haitiana, así como en zonas pobres en la capital dominicana.
Este destilado no es letal en sí y no suele causar intoxicaciones graves, pero el que ha ocasionado las muertes estaba contaminado con metanol, un alcohol muy tóxico.
Datos oficiales actualizados hasta junio del pasado año indican que 334 personas se intoxicaron por la ingesta de estas bebidas, de las que 215 murieron entre abril y junio de 2020.