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La Navidad se caracteriza por reuniones de familias, amigos, parejas, compañeros y allegados de distintos grupos, para pasar momentos de unión, donde se sientan en la mesa para cenar y posteriormente intercambiar regalos y el tradicional abrazo.
Por el vínculo entre los que comparten la mesa, sus similitudes y diversidades la cena navideña, mientras pasan el momento, además de disfrutar la comida que se prepara para esta festividad, también surgen las tradicionales pláticas.
Sin embargo, no se puede hablar de todo mientras se disfruta la cena de Navidad, hay temas incómodos, que ponen pesado y ardiente el ambiente, detalles que son intocables o innombrables si queremos que esta noche quede como un recuerdo bonito y sin inconvenientes.
Auxiliados de la Inteligencia Artificial, esta es la lista de los temas que se recomiendan no traer a la mesa de conversaciones:
– Política: las diferencias ideológicas suelen ser motivo de debates acalorados.
– Religión: a pesar de que la Navidad tiene un trasfondo religioso, discutir creencias personales puede causar tensiones.
Dinero: hablar de problemas financieros o comparar ingresos puede resultar incómodo para algunos.
Problemas familiares: es preferible no traer a colación conflictos pasados o temas controversiales dentro de la familia.
Temas complejos o negativos: enfermedades, muertes o cualquier asunto que pueda ser delicado para otros.
Vida personal de manera crítica: evitar juicios sobre relaciones, trabajos o decisiones de vida de los demás.
Se recomienda que las personas que estén reunidas durante la cena conversen sobre temas de recuerdos agradables, planes futuros o temas de interés común, los cuales promuevan un ambiente festivo y armónico.
Que la mente esté centrada en disfrutar los platillos, pasar un momento con cariño y amor con las personas que más quieres y, si no estás con ellas, mandarles un breve mensaje para que se den cuenta de la importancia que tienen en tu vida.